Hacer una predicción de como va a ser El sector energético de 2018 en España y posteriores tiene las mismas probabilidades de cumplirse que comprar un billete de lotería de Navidad y esperar que te toque. ¡muy difícil por no decir imposible!
Sería mucho más fácil si todos los partidos políticos hicieran un pacto de estado por la energía y tuviéramos una hoja de ruta a medio y largo plazo. Para poder vislumbrar dónde queremos estar en 20-30 años que es la vida útil y económica de una central de generación energética.
Ejemplo de esta descoordinación
Lo tenemos en las declaraciones del actual Gobierno. Mediante el actual ministro de energía que acaba de filtrar a los medios sendos recortes en los sistemas de trasmisión y distribución energética en los sectores de gas y electricidad que nadie esperaba y que finalmente puede que no se lleven a cabo. Pero que han generado inestabilidad y malestar en el sector.
Dicho esto, en general parece lógico pensar que de una forma u otra hay que cumplir con los objetivos dictados por la Unión Europea. Aunque sea con retraso como hasta ahora o vía amonestación económica como también ha ocurrido. Estos objetivos se basan en 3 pilares: generación renovable, eficiencia energética y disminución de emisiones de CO2.
En el área de generación, parece que con la última subasta de renovales impulsada el año 2017 llegaremos a los objetivos de generación renovable fijado por la UE de 2020. Pero quedan muchas decisiones que tomar: ¿Qué hacemos con las nucleares? ¿Qué hacemos con el carbón?
Ausencias
Asimismo, la ausencia de incentivos y trabas impuestas a la generación renovable en instalaciones más pequeñas no parece tener sentido en un país como el nuestro. Esto es porque no dispone de combustibles propios mas allá del carbón. Será eliminado más pronto que tarde. Del mismo modo que la ausencia de ayudas a otros sistemas de generación más eficientes. Por ejemplo, la cogeneración o la generación eléctrica con biomasa o residuos. Son combustibles autóctonos no sujeto a inestabilidades geopolíticas. No se entiende desde ningún punto de vista.
En el área de eficiencia, se han dado pasos que poco a poco van dando sus frutos. Es verdad que vamos con retraso frente a nuestros vecinos más avanzados (Alemania, Francia, Italia, etc.). Pero parece ser que desde las Administraciones Públicas se está impulsando iniciativas en esta línea. Aaunque lentas parecen que son firmes y cada vez más extendidas. A esto ha ayudado que las inversiones en esta área no computen como deuda mediante un cambio reciente de Eurostat. Así como la mayor cantidad de líneas de liquidez y créditos con fondo europeo que financian este tipo de actuaciones.
Sector privado
Aquí, la mayor concienciación del coste energético como coste a reducir dentro en las empresas, así como la aparición de empresas de servicios energéticos que asumen los riesgos técnicos y económicos de este tipo de proyectos, está ayudando a su consolidación en distintos sectores. Parece ser una tendencia que va a ir en aumento en el futuro. Dentro de esta área hay medidas. Como la sustitución de iluminación por tecnología LED. Mejora de los parámetros de contratación, producción de calor y frio por sistemas de aerotermia. Implantación de sistemas de gestión energética parecen ser las actuaciones cada vez más comunes y eficaces que ayudan a la reducción del consumo energético.
La tercera área. Reducción de emisiones de CO2. Va directamente ligada a las otras 2 áreas anteriormente descritas pero tiene una parte muy importante el sector transporte donde la mayoría del parque actual funciona con combustibles fósiles que en el corto plazo es imposible cambiar.
En este sentido, la aparición del “car sharing” como concepto de pago por uso y la penetración del coche eléctrico en las áreas metropolitanas parecen las medidas más eficaces unidas a los requerimientos cada vez más estrictos de emisiones y eficiencia en el parque automovilístico para cumplir este objetivo.
Quedan muchos pasos y muchas incógnitas por resolver por dar pero parece ser que estamos moviéndonos en una senda que no tiene marcha atrás y que va en la línea marcada por la Unión Europea de ser líderes en estos sectores frente a la competencia de países como EEUU, Japón o China que también están avanzando en esta línea.
Emilio de Andrés
Director de E4e Soluciones
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